Tipos de modelos de recibo

Tipos de recibos

En este artículo analizamos en mayor profundidad cuáles son los tipos de recibos existentes, y la finalidad de cada uno de ellos.

El recibo es un documento de gran importancia para las empresas, porque permite acreditar y servir como elemento prueba de una transacción.

En muchas ocasiones no tendrá por qué reflejar el pago al completo, sino que podrá ir enfocado a cubrir una parte proporcional del importe, a indicar un adelanto o similar. Y es que al final, la finalidad e identidad de este documento va dirigida a identificar que ha existido en efecto, una operación económica.

No existe una única clasificación en cuanto a los tipos de recibos existentes, sino que función del tipo de servicio o producto que se pretende comercializar, así como atendiendo al formato del documento, se pueden establecer diferentes estilos de recibos tal y como veremos a continuación.

Tipos de recibos más frecuentes

Entre los tipos de recibos más frecuentes podemos destacar los siguientes:

  • Recibo de arrendamiento o alquiler. Esta modalidad de recibo permite identificar que se ha recibido el importe asignado a la mensualidad por parte de un inquilino o una persona que efectuara el arrendamiento. El recibo de arrendamiento siempre deberá ser emitido por parte del propietario del bien.
  • Recibo de caja o comprobante de ingreso. Sirve para acreditar que en efecto, el acreedor recibió por parte del deudor la cantidad especificada que generalmente suele provenir de un ingreso en efectivo. En general, el original se da al cliente y la copia se almacena una para el archivo consecutivo y otra se anexa al comprobante de contabilidad con carácter diario.
  • Recibo de caja o comprobante de egreso. Permite certificar que se ha producido un desembolso económico para adquirir bienes o por supuesto, servicios al contado. Tan importante es el comprobante de ingreso como éste, ya que identifica que ha existido un pago relacionado con una operación comercial.
  • Recibo de Depósito en cuenta corriente. Este tipo de recibo sirve como comprobante de las transacciones realizadas en caja de ahorros o cuenta corriente, con el dinero de una sucursal bancaria. Debe ir firmado y sellado por la entidad financiera. Generalmente hacen referencia a fondos de libre disponibilidad del depositante que podrá retirar el dinero a través de cajeros o cheques.
  • Recibo de Depósitos en garantía. Se emite por el banco para garantizar el préstamo facilitado, como consecuencia de haber recibido algún título de propiedad. Así se garantiza la deuda capital y los intereses devengados.
  • Recibo de Depósitos en custodia. Quizás este tipo de recibo sea menos conocido por las personas no especialistas en contabilidad. Se emite por los Bancos o instituciones depositarias, y sirve como garantía para la recepción de joyas, valores, etc. que deberán devolverse en un plazo determinado, cuando el depositante abone una comisión correspondiente.
  • Recibo de Depósito a plazo fijo. Es el banco quien emite este tipo de documento con carácter mercantil. En él se debe especificar cuál es el plazo del depósito: a 30, 90, 360, etc. días y cuál es el importe de interés reconocido. Una vez se alcanza la fecha de vencimiento, el capital suele ser devuelto junto con los intereses.
  • Recibo de Depósito judicial. El recibo de depósito judicial solo puede ser realizado por una entidad financiera siempre por orden de un juez o autoridad judicial, y sirve de garantía de un depósito en dicho banco. Así mismo, para proceder a la retirada de fondos también se necesitará de la autorización judicial competente.

Como vemos, el recibo adquiere un papel protagonista en la contabilidad de cualquier institución o empresa en la que tengan lugar transacciones económicas que requieran ser reflejadas y garantizadas por ambas partes.

Descubre nuestras plantillas de recibos y aprende cuál es el formato adecuado y las secciones que deben incluir para ser válidos.

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