Consejos para contratar una empresa auditora para la empresa
A veces dentro de la empresa se generan situaciones en las que no sabemos exactamente dónde está el problema. En el caso de las finanzas, puede ser que se esté gastando más de lo que se ingresa, pero no se sabe a ciencia cierta dónde se está invirtiendo más. Una posible solución a este problema es realizar una auditoría empresarial.
De este modo, podremos identificar cuáles son los puntos fuertes de la empresa y cuáles son los puntos débiles. Asimismo, podrá orientarnos en la búsqueda de soluciones a situaciones que nos estén ocasionando problemas.
Si bien es cierto que las auditorías suelen poner nerviosos a los empresarios, cabe señalar que es una práctica bastante habitual dentro del ámbito empresarial. Sus principales funciones son:
- Aportar un análisis de la función de los controles contables, financieros y operacionales.
- Comprobar si se están cumpliendo los procedimientos de carácter obligatorio.
- Conocer el grado de confianza de las informaciones y datos contables de la empresa.
- Saber cuál es el nivel de calidad de la ejecución de las tareas.
- Calcular los riesgos a los que se enfrenta la empresa.
¿Qué analizar al contratar un auditor interno en la empresa?
Ya tenemos claro cuál es el objetivo de la auditoría en la empresa, nos va a ayudar a realizar una radiografía del estado de nuestra empresa.
La pregunta que puede surgir a continuación es ¿cómo podemos elegir el auditor más adecuado para la compañía? A continuación ofrecemos una serie de recomendaciones que nos ayudarán a contratar alguna empresa auditora.
Petición de presupuestos
Deberemos mirar qué auditorías existen del mercado. Ver la relación calidad precio de cada una de ellas. Esto implica solicitar presupuestos, estudiar las propuestas, que servicios ofrece cada una, así como la experiencia de cada una de las empresas auditoras. Procurar que el presupuesto que se nos entregue sea lo más detallado posible. Como por ejemplo por áreas de trabajo: inventario, deudas, clientes, etc. Asimismo, debemos conocer cuál es el mínimo de horas que requerirá el trabajo, ya que algunos suelen exceder en horas para poder facturar más.
Solicita referencias
Algunas veces nuestra propia competencia ha podido solicitar una auditoría. Podemos investigar quién fue su empresa auditora o intentar contactar con alguno de sus antiguos clientes.
Área de actuación
Esto significa ver con qué tipo de redes han trabajado, sí son del mismo tamaño que la nuestra, del mismo sector, etc. Si la empresa auditora tiene ya experiencia en empresas como la nuestra, su análisis será más eficaz y llevará menos tiempo en realizarlo.
Confidencialidad
Es primordial que el auditor se comprometa a que todas las informaciones derivadas de su análisis de contabilidad permanezcan bajo la más estricta reserva. De hecho, este punto de confidencialidad debe reflejarse en un contrato.
Seleccionar el auditor acorde a nuestro tamaño de empresa
En España existen tres niveles de auditores:
- Las cuatro grandes especializadas en entidades que cotizan en bolsa, entidades de crédito y grandes multinacionales.
- Las empresas que auditan empresas de tamaño medio con un volumen de facturación entre 6 y 100 millones de euros. Suelen tener un equipo multidisciplinar y ofrecen servicio en todo el territorio nacional.
- Pequeñas empresas de auditorías para pymes y facturación no mayor de 10 millones de euros. Prestan sus servicios en una localidad concreta.
Sin relación con nuestra empresa
Es mejor decantarse por aquellas empresas auditoras sin ningún tipo de relación ni con nuestro negocio, ni con asesores fiscales o consultores conocidos.
Otras cuestiones
Investigar si existe algún tipo caso de litigio en contra de esta, o cuáles son sus procesos de control de calidad, por ejemplo.
Estas son algunas recomendaciones que pueden ayudarnos a elegir la empresa auditora. Esta estará revisando nuestras cuentas anuales durante un tiempo mínimo de tres años, de ahí que sea importante realizar una buena selección.