¿Cuáles son las principales causas y consecuencias de la inflación?
La inflación no es otra cosa que la subida generalizada de los precios de los bienes y servicios. Aunque por regla general los consumidores vemos a la inflación como un gran mal. Pero a veces la inflación también puede ser beneficiosa. Pero veamos cuáles son sus causas y consecuencias, explicando en qué consiste cada una de ellas.
¿Qué provoca una inflación?
El incremento de los precios no es casualidad, sino que existen una serie de motivos por los que los precios se disparan. Lo importante es saber reconocerlos para poder actuar:
Inflación monetaria
Esta se debe al incremento de emisión de moneda (billetes, monedas, bonos del tesoro, etc.) por el Banco Central que saca al mercado más moneda de lo habitual. Los bancos centrales no son los únicos culpables de la inflación monetaria ya que los bancos comerciales también juegan un papel importante al conceder créditos a empresas y particulares. Este tipo de inflación está relacionado con una mala gestión del gobierno, ya que recurre a la impresión de billetes con el fin de reducir la deuda pública a reembolsar.
Inflación por los costes
Esta se debe al aumento del precio de las materias primas que son importadas y que se repercuten en el precio de venta final. Como ejemplo, tomemos el pan fabricado a base de harina. Si el precio de la harina aumenta, la empresa que fabrica este pan se topará con unos precios de coste de producción más elevados. Por consiguiente, deberá aplicar esta subida en el precio de venta del pan. En este caso, la empresa puede absorber en parte, una subida de los precios en las materias primas. Pero si esa subida se incrementa demasiado, le será muy difícil poder mantener sus precios de venta.
Inflación por la demanda
La inflación de demanda se produce cuando hay un desequilibrio entre la oferta y la demanda en un tipo de producto. Si la demanda es superior a la oferta, los precios de ese producto se incrementarán automáticamente hasta que encuentran un punto de equilibrio. Si esa oferta es incapaz de atender a la demanda, es cuando la escasez de ese producto hará que los precios aumenten, por consiguiente, este proceso creará inflación.
Inflación por la política monetaria
La política monetaria controla los factores monetarios para garantizar una estabilidad de precios y un mejor crecimiento económico. Por lo tanto, si los bancos bajan los tipos de interés aumentará automáticamente la inflación. Por una parte, la moneda se depreciará y, por otra, los bancos recurrirán a prestamos masivos al banco central, ya que el coste del dinero es más bajo. Además, los bancos comerciales prestarán más a la población, lo que creará aún más inflación.
Inflación por falta de confianza en la moneda
La moneda que usamos a diario no tiene más confianza que la que le otorgamos. Según los mercados financieros, esa falta de confianza en la moneda se traduce por la caída de su tipo de cambio. De forma que, si un inversor desconfía en el euro, por el motivo que sea, este se devaluará frente a las demás monedas. Esto también favorece la inflación.
Las consecuencias de la inflación
Sea cuál sea el motivo de la inflación, esta afectará a la economía, tanto a gran escala como a pequeña escala, provocando los siguientes resultados:
- Aumento de los salarios
- Aumento del costo de la vida
- Las inversiones a largo plazo tienden a desanimarse debido a la inseguridad en los precios de los factores productivos mirando al futuro
- Los deudores se verán beneficiados, ya que el valor real de las cuotas de los préstamos y las tasas de interés caen en situaciones de inflación
- La moneda del país se deprecia, alentando la preferencia por monedas extranjeras. Puede llegarse a extremos en que los consumidores solo la usarán para comprar productos de primera necesidad
- La verdad es que, como consumidor, la gente sentirá que ya no les alcanza el salario para poder mantener su nivel de vida buscando la forma de tener más ingresos o por el contrario recurriendo al endeudamiento.