10 facturas más utilizadas por las empresas

Existen diversos tipos de facturas utilizadas por las empresas que a su vez pueden clasificarse según diversos criterios. Teniendo en cuenta estos últimos, que proporcionamos a continuación un listado de las facturas que más se utilizan en la empresa.

Listado de las facturas que más se utilizan en la empresa

Entre las facturas más utilizadas se encuentran:

Factura electrónica vs factura tradicional, en función del formato.
Factura ordinaria, rectificativa o recapitulativa, en función del contenido.
Factura simplificada o completa, a tenor de los requisitos.
Factura proforma, copia de factura o duplicado de captura, sobre la base de su valor.

Es posible que conozcas otras, pero, de momento vamos a tratar cada una de las facturas mencionadas.

Factura electrónica vs factura tradicional, en función del formato

La factura electrónica o e-factura no cuenta con ningún soporte físico sino es meramente digital, si bien es perfectamente válida puesto que está firmada digitalmente.

Dentro de las dictaduras dos veces algunas que en pueda ser directamente contabilizadas por los programas de facturación y se denomina estructuradas. En caso contrario, se denominan no estructuradas.

Frente al anterior la factura tradicional es la que consta en un soporte físico. Es decir, en papel, y lleva la firma original.

Factura ordinaria, rectificativa o recapitulativa, en función del contenido

La factura ordinaria, que es la más habitual, es la que refleja la contraprestación a pagar por un pedido de mercancías o un servicio realizado. Frente a ella, se habla de factura rectificativa, cuando el objeto de la factura no es reflejar una operación, sino corregir las facturas anteriores.

Por último, las recapitulativas pueden emitirse de forma opcional, a modo de resumen de todas las facturas emitidas a un determinado cliente en un periodo de tiempo, aunque, lo más normal es que sustituya a las facturas incluidas en la misma. Lo que se busca es reducir el número de facturas y simplificar tanto la contabilidad como la facturación para proveedor y cliente.

Factura simplificada o completa, a tenor de los requisitos

Se entiende por factura simplificada un tipo de factura que no reúne todos los requisitos establecidos en la ley, pero que es admisible en empresas que tienen obligación de emitir numerosas facturas diarias como ocurre con restaurantes, talleres, u otros. Este tipo de facturas incluye los datos del emisor pero no del cliente.

Este tipo de factura es el de sustituido al ticket.

Frente a ellas, las facturas completar aumento en los requisitos necesarios, incluyendo datos de emisor y cliente, importe, base, IVA, retención, número de factura, fecha de emisión, concentró y forma de pago.

Factura proforma, copia de factura o duplicado de captura, sobre la base de su valor

La factura proforma no tiene un verdadero valor de factura. Se utiliza a modo de presupuesto, enviándose con anterioridad a la contratación del pedido o del servicio que corresponda. Su objetivo que cliente tenga conocimiento de lo que se le va a cobrar y por qué conceptos. Una vez contratado el pedido o servicio, y ejecutados, se remitirá la factura original, que es la que tiene el verdadero valor de factura.

Se entiende como copia de factura aquella que queda de cada factura en los archivos del emisor.

La factura duplicada sólo se emite con carácter excepcional, tiene el verdadero Valor de factura, pero está reservada para el caso en que el receptor hubiese perdido el original de la factura puesta se hubiese extraviado.

Todas estas facturas pueden utilizarse cualquiera que sea el proceso de facturación que use nuestra empresa, desde hojas Excel, facturación anual, programas de facturación y programas de facturación en la nube. En todo caso las facturas dan de reunir los requisitos establecidos en la normativa vigente, concretamente, reglamento de facturación (RD 1619/2012) y la legislación sobre el IVA, ya que no sólo es un documento justificativo de la realización de una operación, como antes mencionábamos, sino también de la repercusión y soporte por parte del cliente de las correspondientes cuotas de IVA relacionadas con la misma.