Facturación en un coworking

¿Los espacios de Coworking emiten facturas? Conoce cómo funcionan

¿Estás pensando emprender un negocio y utilizar un espacio de Coworking? Esta práctica es cada vez más popular y tiene grandes ventajas para el freelance o emprendedor que decide usar las oficinas compartidas como su sede. Trabajar en un Coworking es como trabajar en una empresa, pero en vez de compañeros de diferentes departamentos el empresario está rodeado de profesionales que pueden ayudarle a construir una red fuerte de networking. 

En un espacio de Coworking cada profesional trabaja para su empresa y busca su beneficio propio, pero son espacios propicios para fortalecer las relaciones entre compañeros. Esta práctica surge bajo la economía colaborativa, donde los usuarios comparten sus conocimientos e ideas. Además el espacio pone a disposición del usuario salas de reuniones, espacios para invitar al cliente o incluso cafeterías. Todos estos servicios son facturados por el Coworking y pueden ser desgravados por el freelance o autónomo. Una de las principales ventajas de este servicio es la posibilidad de desgravar el alquiler y los servicios que ofrece el Coworking.

¿Es posible conseguir una factura trabajando en un Coworking?

La relación que existe entre el empresario y el espacio de Coworking está basada en un contrato de arrendamiento, por eso no hay emisión de facturas como servicio de alquiler del Coworking. Es necesario firmar un contrato de alquiler y todos los meses el regente del Coworking facilita un recibo de arrendamiento.

El alquiler en un espacio de Coworking varía en función de cada establecimiento, existen tarifas de persona/día o por puesto fijo. Esto depende de cómo está estructurado el espacio de trabajo. Dentro de la cuota de alquiler se incluyen diferentes gastos asociados a la oficina como es Internet, teléfono fijo, material de oficina… Así como los suministros de luz, agua y gas. Todo está incluido en el precio del alquiler del Coworking que puede ser desgravado en el IRPF del autónomo.

Entonces, ¿qué facturas puedo conseguir en un Coworking? Como hemos visto una de las grandes ventajas de las oficinas compartidas es la gran oferta de servicios que dispone, el usuario puede disfrutar de estos servicios extras que serán facturados de manera independiente al alquiler del espacio. Todas estas actividades ofrecidas por el Coworking pueden ser desgravadas por el autónomo, y por eso, tiene grandes ventajas fiscales esta práctica.

Estas son algunas de las actividades del Coworking:

  • Comidas con clientes realizadas en la cafetería del Coworking
  • Alquiler de la sala de reuniones o salas multi-espacio
  • Catering de desayuno para ofrecer a los clientes
  • Cursos asociados a la actividad de la empresa
  • Conferencias ofrecidas en el propio espacio de Coworking

Tras disfrutar de uno de estos servicios es posible solicitar la factura y contabilizarla para desgravar el IVA correspondiente.

Recuerda que cada espacio de Coworking es diferente, y por eso, a la hora de buscar un espacio compartido es importante conocer las tarifas que tienen, los servicios extra que disponen y la recomendación de otros usuarios del espacio.

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