Partes de una factura de abono

La factura de abono es el nombre común con el que se le suele conocer a la factura rectificativa. También adopta otros nombres como nota de abono. Este documento suele emplearse cuando tenemos que corregir algún tipo de error de la factura original o agregar algún dato más.

En este sentido, la factura de abono puede ser una factura negativa. Esta situación se da cuando la factura original no cumple con los requisitos legales vigentes o cuando se produce algún tipo de error. A modo de ejemplo, se puede utilizar la nota de abono como corrección de un error de precio, descuentos o devoluciones en un producto.

Asimismo, la factura de abono puede ser una factura positiva, en cuanto a que debemos agregar datos. Cuando se da esta situación es porque se omitieron por error o porque es necesario añadir más datos para que la factura sea legal o esté correcta.

En cualquiera de los casos, el departamento de contabilidad registrará estas facturas con su nombre técnico. Esto es factura rectificativa, tal como se establece en el Reglamento de Facturación de 2013.

Cuándo debemos emitir una factura de abono

Aquí te indicamos los casos más habituales para poder usar este tipo de factura:

Cuando la factura original no cumple con los requisitos obligatorios previstos en la ley.
Cuando haya una devolución total o parcial de un pedido.
Si nos hemos equivocado en el precio o al establecer el IVA.

Cómo se hace una factura de abono

Veamos cuáles son las partes de una factura de abono:

Numeración. Al igual que en una factura ha de anotarse la numeración y ésta ha de ser correlativa. Debemos también en cuenta que algunas veces también incluiremos la serie, en caso de ser necesario.
Fecha de expedición.
Nombre y apellidos, razón social o CIF tanto del destinatario como del emisor.
El número de identificación fiscal bien de Hacienda o por la Administración tributaria de otro Estado miembro de la Unión Europea. Existen tres factores a tener en cuenta. Este número será obligatorio en aquellas entregas de mercancías entregadas a otro Estado miembro. Otro factor es si el destinatario es el sujeto pasivo del impuesto correspondiente y si las operaciones han sido realizadas en el territorio donde se aplica el impuesto. Y, por último, se ha de incluir en las facturas que se hayan expedido en el territorio de aplicación del impuesto y que el empresario esté establecido en dicho territorio.
Domicilio tanto del emisor como del destinatario.
Descripción de la operación. Se darán todos los detalles de las operaciones para calcular la base imponible del impuesto. También ha de incluirse el precio unitario sin aplicar el impuesto, así como el descuento o rebaja.
El tipo o tipos impositivos.
La cuota tributaria.
La fecha en la que se hayan realizado las operaciones mencionadas e incluir si se ha realizado algún pago anticipado.
Si se tratara de una operación exenta de IVA habrá que mencionar las razones.
Fecha de cuando se ha realizado la salida de la mercancía. También se anotará el día de la entrega, así como la distancia recorrida en dicho medio de transporte.
Mencionar si existe facturación por el destinatario, es decir, si es el cliente quien emite la factura.
Si el sujeto pasivo del IVA es el cliente se ha de hacer mención a la “inversión del sujeto pasivo”
En el caso de ser una agencia de viajes hacer mención al régimen especial de la agencia de viajes.
En el supuesto de objetos de arte, antigüedades, coleccionismo o bienes usados mencionar su régimen especial respectivo.
También indicar si se aplica el régimen especial de criterio de caja.

Además de anotar todas las partes de la factura de abono, este tipo de notas han de figurar por separado en el libro-registro de facturas expedidas, así como evitar su duplicidad. Asimismo, se han de registrar en una hoja independiente del libro de Registro de Facturas Recibidas.

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