Cómo aplicar anticipos y descuento de facturas
La Confederación Española de Sociedades de Garantía explica en su IV Informe sobre Financiación de la Pyme en España que más de la mitad de las pequeñas y medianas empresas españolas tiene problemas para financiarse. En estos casos, el anticipo o descuento de facturas puede ser una buena solución. Este mecanismo financiero permite el cobro por adelantado de las facturas emitidas, estén o no retrasadas. La empresa, en calidad de acreedor o librado, recurre a una entidad financiera, el librador, que le facilitará el importe de las facturas presentadas tras descontar los correspondientes intereses y gastos de gestión. En otras palabras, la empresa le vende a la entidad crediticia el derecho a cobrar sus facturas.
Cómo solicitar el anticipo o descuento de factura
Esta fuente de financiación con facturas a corto plazo presenta numerosas ventajas para las pymes. A continuación te explicamos todo lo que necesitas saber para pedir el anticipo y descuento de facturas.
1. Selecciona las facturas que quieras cobrar por adelantado
El primer paso a la hora de pedir el anticipo y descuento de facturas es elegir los documentos que se pretenden canjear. Si necesitas el adelanto para un fin concreto, deberás asegurarte de que el importe a reclamar sea superior, ya que la entidad financiera se quedará con un porcentaje en concepto de intereses y gastos de gestión. Para reducir en la medida de lo posible esta comisión, siempre podrás elegir las facturas con menor riesgo de impago, en función de la solvencia del destinatario. También es posible aprovechar esta transacción para deshacerse de aquellos clientes con mayor índice de morosidad, aunque en este caso los intereses serán mayores.
2. Contacta con la entidad crediticia
El siguiente paso será ponerse en contacto con una o varias entidades financieras o plataformas de venta de facturas. Asegúrate de que permiten pedir el anticipo y descuento de facturas, ya que no todas ofrecen este servicio. Además de la banca tradicional, en la actualidad muchas otras entidades de crédito realizan dicha operación. El hecho de que estas últimas operen a través de internet explica que ofrezcan mayor rapidez y facilidad en comparación con los bancos. De cara al siguiente paso, es recomendable consultar con varias empresas. Cuantas más opciones, más informada será nuestra decisión y mayor rentabilidad obtendremos al pedir el anticipo y descuento de facturas. Descubre en este artículo qué empresas proporcionan una línea de anticipo de facturas y consulta sus servicios.
3. Sopesa las condiciones que te ofrecen
El porcentaje que la entidad se quedará en concepto de intereses dependerá en gran medida del tipo de anticipo de facturas que solicites. Existen dos tipos: con y sin recurso. Para saber cuál elegir, es fundamental analizar la solvencia de los clientes cuyas facturas vamos a descontar. En el caso del anticipo de factura sin recurso, el más habitual, la entidad crediticia asume el posible impago de la factura. Por el contrario, si solicitas un anticipo con recurso y tu cliente no satisface la deuda, la empresa financiera te reclamará el importe adelantado y deberás hacer frente al impago tú mismo. Como es lógico, los intereses a pagar serán mayores en el primer caso.
4. Invierte con cabeza el dinero adelantado
Una vez elegida la entidad crediticia y la forma que mejor se adapta a tus necesidades, es momento de pedir el anticipo y descuento de facturas. Debes tener en cuenta las implicaciones de esta operación: obtendrás por adelantado el importe de una o varias facturas, pero una parte irá al acreedor y no podrás contar con dicha cantidad en el periodo habitual. Así pues, el fin al que se destine el anticipo determinará su rentabilidad. Lo lógico será emplearlo, por ejemplo, para beneficiarse de descuentos por pronto pago o para realizar inversiones de gran envergadura.
5. Convierte el anticipo en una operación recurrente
Si en vez de solicitar el anticipo de la factura para un pago puntual lo que buscas es una financiación a largo plazo, se puede solicitar una línea de anticipación de facturas. La entidad financiera gestionará todas las facturas y nos ingresará el dinero en el mismo momento de emisión de la factura al cliente. Ellos se encargan del seguimiento del pago.
